Una gran mayoría de las madres que aún visitan las aulas se encuentran solteras y provienen de hogares con una situación económica desfavorable. Más de la mitad quedaron embarazadas entre los 16 y 17 años.
El estudio realizado por el Ministerio de Educación Pública (MEP) reveló que el 88 por ciento de las jóvenes no utilizaron métodos anticonceptivos durante las relaciones sexuales, a pesar de que los conocían. Algunas de ellas dijeron que los preservativos eran muy caros o que sus parejas le pidieron no usarlo.
Lo que más preocupa al MEP es lo que motiva a las jóvenes a abandonar los estudios de secundaria. Solo un 65 por ciento dijo haber recibido apoyo del colegio al que asisten, en otros casos, se evidenciaron situaciones en las que ni siquiera las dejaban ir al baño o las trataban despectivamente.
“No es alcahuetería”
“El mejor lugar para una madre adolescente es el aula”, es la frase que acuñó el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) en su reciente campaña para sensibilizar a los costarricenses sobre la necesidad de que las estudiantes embarazadas continúen dentro del sistema educativo.
“Si se salen del colegio, podrían reproducir de nuevo el ciclo de la pobreza” señaló Mario Víquez, presidente ejecutivo del PANI.
El estudio “Adolescentes embarazadas y madres dentro del sistema educativo” se realizó con una muestra de 154 estudiantes de colegios públicos en todo el país, durante el 2006.
